¡COMPRAMOS A LOS NIÑOS!

A menudo educamos a nuestros hijos a través del CHANTAJE puro y duro. Por ejemplo:

 

"No hagas eso o ..."

a.- "... me enfado."

b.- "... te dejo sin postre."

c.- "... no te compro txutxes."

d.- "... te mando a un colegio interno."

Con estas tretas los aitas y amas no nos comemos nada y a la mínima cedemos y se nos suben a la chepa. Hay que ser más imaginativo.

OLENTZERO puede ser nuestro aliado. Olentzero todo lo ve. Olentzero trae regalos la noche del 24 de Diciembre, pero el resto de las noches del año no está ocioso... Se lleva los juguetes de los niños que se han portado mal. Además tiene teléfono móvil y podemos llamarle cómodamente delante de ellos para chivarnos.

 

 

Es coger el teléfono sin decir nada y todo el mundo comienza a portarse bien. Mano de Santo. Pero no conviene abusar de ello y mientras hay que ir buscando un plan B.

 

Un sábado por la mañana, en la que mis hijos estaban especialmente revoltosos, una "fregoneta" pasó por debajo de casa.

 

 

Por su megafonía podía escucharse:

 

"YA ESTA AQUI EL CHATARRERO.

RECOGEMOS CHATARRA, NEVERAS, LIMPIAMOS TRASTEROS...

¡COMPRAMOS A LOS NIÑOS!"

 

¿¡COMPRAMOS A LOS NIÑOS!?

 

Te los quitan de encima y encima te pagan, ni te cobran ni nada...

 

Abro la ventana para oírlo mejor. A la tercera lo pillo:

 

"¡COMPRAMOS ALUMINIO!"

 

Pero... me puede servir. Además pasa con frecuencia... Esto hay que explotarlo...

 

¡Ja! EL HOMBRE DEL SACO no tiene nada que hacer con EL CHATARRERO.